#ElPerúQueQueremos

George Harrison - Thirty Three & 1/3 (1976)

This song we'll let be, this song is in E

Publicado: 2016-09-28

Publicación: 19 de Noviembre de 1976

Grabación: Mayo 76 - Septiembre 1976

Productor: George Harrison y Tom Scott

Después de la debacle de los dos discos anteriores, nuestro Beatle tranquilo ya con 33 años encima toma la decisión de abrir su propia compañía discográfica, “Dark Horse”, para publicar ahí su séptimo disco (primero con su empresa), juntarse con varios amigos músicos (Billy Preston, Gary Wright, David Foster, etc) y sacar del tintero mejores canciones que las que grabó en años anteriores. Todo parecía color de rosa para George pero se vio golpeado por dos temas: primero fue afectado por una hepatitis y segundo fue el inicio del juicio por el plagio de “My Sweet Lord”. 

Pero a pesar de todo lo negativo, Harrison deja de lado esa aura dramática y fatalista del Dark Horse y Extra Texture para comenzar a disfrutar un poco de la música otra vez con un disco mucho más ligero y con un aire bastante pop/soul que en espíritu está más cerca del Cloud 9 que del ATMP. Como decía, a George se le veía de mucho mejor humor probablemente por la mayor cercanía que tenía en esos días al grupo cómico Monty Python (incluso grabó varios videos promocionales bastante divertidos) y el inicio de su relación con la que sería su esposa Olivia Arias.

le  juro señor juez que no he plagiado

El disco comienza captando esa energía positiva con “Woman Don’t You Cry For Me” con un bajeo y ritmo super funk aunque George hace contraste sonando tranquilo y algo apagado en los versos pero acelera en los coros y se lanza con una buena melodía. Gran canción a pesar de ése sospechoso aire disco. Mi otra favorita es “It’s What You Value” donde se nota a la banda super sincronizada y Preston lleva el peso de la canción con esa bailable riff de piano y George suena genial, ya con la voz totalmente recuperada metiendo bastantes ganchos y falsettos en el coro. Para el final se van agregando saxos que redondean bien el espíritu festivo de la canción.

Lastimosamente, en el otro lado de la orilla están naufragando “Dear One” y “See Yourself”. La primera con una intro lenta, eterna y aburrida que se combina con una melodía muy infantil para George y una letra simplista y religiosa. Pero la mayor ofensa es sin duda la segunda canción, ni siquiera tiene melodía vocal y para colmo Harrison le agrega un horrible sonido de sintetizador al final de cada fraseo que incluye un insoportable sermoneo. Vamos George, ¿Por qué tardaste tanto en darte cuenta que intentar emular el ATMP era caso perdido?

con olivia arias, su futura esposa

A pesar de estos dos deslices el resto del disco termina siendo muy entretenido, primero con “This Song” de nuevo con ése espíritu soul/pop que le debe mucho otra vez al señor Preston y con un George muy sarcástico burlándose de todo el asunto de su juicio por plagio de “My Sweet Lord” (por cierto muy divertido el videoclip). Luego, un escalón más abajo, está “True Love” donde siempre es un placer escuchar los slides de Harrison que entran con toda fuerza en conjunto con los otros instrumentos, y aunque es cierto que esa magia inicial se va perdiendo a medida que avanza la canción, por suerte dura muy poco y no se siente demasiado.

Si eres de los que aun le prende una velita al George de los Fab Four, está la hermosa “Beautiful Girl” que logra rescatar un poco de la esencia del sonido del “Abbey Road” y es la prueba de que el Beatle Tranquilo aún está en él y que es capaz de componer una melodía de primer nivel, hasta los requintos son muy buenos y super feeling. Hablando de baladas también está “Learning How To Love You” y aunque más monótona es rescatable gracias al solo de guitarra que recuerda vagamente al de “Something”. Y para cerrar están el prescindible tributo a Smokey Robinson “Pure Smokey” que más parece un outtake del disco anterior y el single “Crackerbox Palace” que a muchos les gusta pero me suena a intro de serie familiar de los 80 y el falsetto del coro “We’ve been expecting yooouuuuuu” me parece muy simplón.

dando un paseo por crackerbox palace

En conclusión, me llevé una grata sorpresa con este disco. Quizás es el contraste de los dos discos anteriores y estar a la defensiva creyendo que tendría que soportar una hilera de al menos 4 canciones insufribles ¡Pero no! Es cierto que a este disco se le puede acusar de tener algunos auto-plagios y que puede ser muy ligero para alguien como George, que tiene el estigma de ser una persona muy espiritual pero todos tenemos derecho a divertirnos y reírnos de nosotros mismos sino sería irritante tener siempre esa pose de Gurú inalcanzable. Harrison se guardó un par de buenas canciones a sabiendas que ahora las publicaría con su propia disquera y se tomó un par de tragos, los suficientes para volverse el alma de la fiesta y hacérnoslo pasar bien con este buen disco. A partir de aquí el “Quiet Beatle” se tomaría un receso de 3 años donde daría inicio a su vida familiar con Olivia y el nacimiento de su hijo Dhani, así que mientras esperamos su siguiente LP, disfrutemos de este buen puñado de canciones.


Escrito por


Publicado en

Vinilos Perdidos

Reseñas de discos de rock de épocas no tan cercanas a las nuestras